Ruesta se encuentra en la provincia de Zaragoza, a caballo de las comarcas de las Cinco Villas y la Jacetania, corredor natural por el que discurre el río Aragón y el Camino de Santiago en la variante del camino francés.
El pueblo quedó en la década de los 60 completamente deshabitado por causa de la creación del pantano, que había comenzado en los años 30. Dejó a sus habitantes sin tierras con las que ganarse la vida y tuvieron que emigrar. Algunos de ellos pasaron a ser vecinos de Urriés, Artieda, Pamplona, Zaragoza …
En la actualidad, la totalidad de las edificaciones pertenece a la CHE excepto el castillo que es de propiedad particular.
Casi el 100% del suelo urbano y buena parte de su monte es parte del municipio de Urriés.
En 1962, el Camino de Santiago se declara Conjunto Histórico Artístico, incluyendo «los lugares, edificios y parajes conocidos, como los que se determinasen en el futuro». En diciembre de 1993, la UNESCO inscribe el Camino de Santiago en la lista de Bienes Culturales de Interés Mundial y, por tanto, Patrimonio de la Humanidad.
Esta inscripción conlleva la protección del propio camino físico, además de los elementos considerados Bienes de Interés Cultural, como las aldeas, villas y ciudades por las que atraviesa, y del paisaje.
Vista Ortogonal Ruesta, 2016 de Miguel Ángel Zapater
La suma de las gestiones y esfuerzos de la CGT, organización a la que la CHE concedió la cesión del municipio y el Ayto de Urriés, están encaminadas a cuando menos paralizar el desastre cultural y patrimonial que en Ruesta lleva año tras año sucediendo.
Cada vez va a ser más difícil mantener lo ya poco que queda. Lo que no se ha hundido se lo han llevado. Piedras, murales, sillares, pilas bautismales….
En primer lugar estamos intentando realizar junto con Gobierno de Aragón, la CGT y el Ayto de Urriés, la creación de un Plan Urbanístico que marque las normas de futuras actuaciones.
También desde el Ayto queremos imperiosamente que vuelva a Ruesta-Urriés, por ejemplo, una pila bautismal que actualmente se encuentra de jardinera en la Iglesia de Formigal, deshaciéndose día tras día.
Seguro que con el esfuerzo sumado de muchos conseguiremos que Ruesta, con todo su espectacular patrimonio, sea un punto importantísimo dentro del Camino de Santiago aragonés. De otra manera proyectos como éste siempre estarán cojos y faltos de sentido.
